Con la llegada del verano, se multiplican los desplazamientos, cambian las rutinas y aparecen nuevas necesidades de salud. Las altas temperaturas, los viajes y la exposición solar prolongada pueden alterar el bienestar y condicionar los tratamientos médicos habituales. Por este motivo, el Colegio de Farmacéuticos de Málaga alerta de la importancia de planificar la medicación en vacaciones y la importancia de contar con determinados fármacos para el botiquín de viaje.
Aunque recuerdan que las oficinas de farmacia están al servicio de la ciudadanía, aconsejan contar con analgésicos y antiinflamatorios, sueros de rehidratación oral, repelentes y productos para picaduras, productos contra el mareo y fotoprotectores solares en el botiquín, fundamentalmente si se va a viajar.
Además, alertan de lo nocivo que pueden resultar el calor y la humedad para la eficacia de los fármacos. Por ello, recomiendan transportar los medicamentos en envases originales, utilizar neveras portátiles para mantener la cadena de conservación, especialmente en el caso de insulinas o antibióticos en suspensión, y no dejarlos al sol en lugares como el coche.
Antes de iniciar las vacaciones, aconsejan retirar con antelación la medicación prescrita a través de la receta electrónica y llevar siempre la tarjeta sanitaria y la hoja de medicación activa, que recoge principios activos, posología e indicaciones.
En caso de necesitar medicamentos durante el viaje, se recuerda que en otras comunidades autónomas se puede acceder a la medicación prescrita en farmacias. En caso de viajar al extranjero, especialmente dentro de la Unión Europea, la dispensación está más limitada y, en muchos casos, conlleva el pago completo del medicamento.